Momentos en Poesía

Podemos divagar, pensar, soñar, ser nosotros mismos y a la vez los demás, podemos ser únicos, diferentes, raros, anormales. Pero seguiremos siendo nosotros. Existen muchas formas de conectar nuestros corazones. Los sentimientos no solo se expresan, a veces, sin querer, los dicta el alma. Y pensamos que nos equivocamos, creemos que lo hacemos mal, pero nadie nos dijo que cada quien tiene su propia forma de amar. Y dejamos que el tiempo pase, tratando de hacer de nuestra personalidad algo normal, pero, ser parte de un conjunto nos quita esa característica individual. Que nos ha sido dotada naturalmente al nacer y ver por primera vez tantos colores y formas. No solo vemos, pero le damos poder a ello; queremos sentir porque sin eso nada existe. Estar abiertos a lo increíble es una virtud, algo que se debe de crear y cultivar con la experiencia de los mejores momentos de nuestras vidas, en los que no existe nada capaz de explicar tales misteriosas situaciones. ...

Alza la voz y calla. Grita pero no digas nada. Deja que la idea se mueva en el momento, intenta no mencionar lo que tanto acatas. Se la verdad y dila, sin perturbar las voces ondulantes. Termina con el tiempo, el poco que queda, en la juventud y tu vida. Sé un completo extraño y vuelve a ser tú mismo. Da mil vueltas, no volverás al mismo lugar. Por más que huyas, mientras creces más te alejas. Más vas hacia el frente, directo, sigues el camino que la vida te impuso, porque tú no decides ni que ser, ni como ser, ni que pensar; por más que seas un ser autónomo, todo fue programado mientras no lo eras y, entonces, lo único que te queda es callar; el silencio hace que tu voz vuelva a hacerse tuya. Rara, invisible, efímera pero profunda (sincera), la voz que nace del corazón, verdaderamente del corazón de los demás. Porque no somos más que vida, pero hacemos más que muchas otras, no tenemos por qué quererlo, pero lo básico nos parece insuficiente. Y hacemos lo que vemos, en nues...

Paciencia, paciencia, en algún momento, de alguna forma, todo esto acabará. Ya no lamentaras más, ni existir ni querer seguir existiendo. Es así como se nos van los días, cambiamos, renacemos, nos forjamos como la más valiosa de las espadas, aun así seguimos siendo un arma que nunca será usada. Volvemos a lo mismo, el planeta cada hora se acerca a renovarse, cada día, cada mes, cada año la cuenta vuelve a cero, y nosotros seguimos, continuamos — siendo sincero— repitiendo lo que hemos visto desde el primero de los momentos, en que hemos apreciado la perfectamente hermosa depresiva realidad. —Aprendemos a apreciar cada objeto por el sentimiento— No sabemos que es capaz de ofrecernos, es imposible reconocerlo, pero seguimos esperando todo lo que deseamos y luchando imaginariamente por un alba más luminiscente. No todo es oscuridad, sin ella la luz no serviría, sin el equilibrio los colores no existirían. Sin el balance de la fuerza nada tendría sentido, y el sentido existiría r...

Una palabra, una frase, con determinación. es suficiente para cambiar el futuro, futuro nuestro y de nuestro mundo. Cuesta reconocer nuestro poder, cada palabra, cada frase es importante, un si o un no, un vamos, un nos quedamos, Cualquier error es suficiente para comenzar una guerra. Aprender, dejar cicatrices, solo para recordar. Buscamos resultados en los restos, lamentos de seres altamente capacitados, seres que podían llevarnos a donde fuese si tan solo supiéramos seguir. Es una elección lo que suceda, particular, individual, colectiva, universal. Es nuestra decisión lo que nos suceda, selectivamente hemos sobrevivido. Somos los elegidos y cambiaremos la realidad. No debemos de pensar, solo de alternar, entre lo que conocemos y sabemos enmendar. Asumiendo los errores de los demás como sí nuestras fueran las medallas, así lograremos cambiar, siendo la vanguardia de esas tropas tan osadas. La generación de los poderes, las esencias los colores, la inno...

No sé si las personas que brillan lo harán de verdad O será la luz, la cual reflejan con intensidad Si es que acaso todos tendremos esa capacidad: Un aura dorada que expresa bondad, Y seres nobles siendo tan sinceros En sus actos que no carecen de voluntad Y realizan con total cariño y esmero. Es así el amor que damos, Nunca igual al que recibimos, que depende de cuánto valor otorgamos al cariño que decidimos expresar y hacer sentir en el otro. Solo brillan los ojos que piensan en el mañana, porque solo el sol aparece cuando piensan en él y solo la lluvia cae cuando triste está el cielo, pensando en ti y en tu dolor, un sufrimiento ajeno correspondiente al fruto de las acciones y reacciones de seres corruptos y destructores, oscuros, libres, reales dictadores. Se apacigua la oscuridad cuando cantan los autores.

Todo surge y vuelve a surgir, crece y no se detiene, se libera, se expande, se comienza a limitar y no se detiene hasta poderse enfocar. Es que los niveles no existen, es un problema cultural, no enseñan como reconocer las sagradas y ocultas virtudes de los demás. No podemos recordar... Tanto que hemos aprendido, tanto que no podemos recordar. El camino de nuestro destino, escalado podemos ver, imaginamos están en una cima cuyo camino no podemos ver, ni recorrer porque realmente no poseemos la fe de creer, de ser, de continuar siendo nosotros mismos. ¡Y pasamos por tanto! Sin saber cuánto pisamos. Cadáveres putrefactos de intentos olvidados, personas que no mentalizan verse en otro lado, creer que el tiempo es eternamente irreversible y que el espacio no se encuentra limitado. Las oportunidades no existen para el que nunca lo ha intentado. Es así como el tiempo actúa haciendo que se repita el pensamiento he fallado, he fallado, he fallado, he fallado. N...

¡Oh dulce verde poniente, Adictivo y jovial, Enérgico y pacífico, Eres como ese ser singular! Representas la naturaleza y todas sus formas, No eres absorbido, ni reflejado, me asombras, Tu espectro luce ante todos, aunque tu luz… Tu luz apagada se hace tierra, es que el mundo no te desea; Los humanos llaman a su raro planeta Como el material resultante de sus errores y caprichos, No se enteran, no prosperan, aunque no lo crean Pronto solo eso será lo que quede. ¿Verde luz volverás al mundo? Creo que alejado extrañamos tu nombre, Es que la vida es así, crecemos y sin darnos cuenta Ya nos hemos separado de nuestra madre. Tratando de crear uno hemos destruido nuestro verdadero hogar.

— ¿Qué es esto?— le preguntó a su padre. — ¿Esto? Es una reliquia familiar, un reloj de arena. — — ¡Oh, entonces sirve para ver la hora! Pero, ¿Cómo?— —No funciona como otros relojes modernos, pero es simple, la arena depositada en uno de los lados al ser pasada por esa unión permite medir el transcurrir de una hora. Cuando este se llena, ya sabes que pasó. — —Pero, este no tiene nada. — —Así es, le llamo el reloj de la vida y tiene relación con tu madre. — —Ohm, ¿podrías contarme?— —Claro, sé que podrás entenderlo. — Sucedía que en los momentos en que tu madre se encontraba enferma yo compré este artilugio, se lo di para que pudiese estar al tanto de cuándo debía tomar su medicina, lastimosamente cada hora de vigilia debía consumirlas, y así lo hacía, solo las noches eran naturales, su enfermedad se alimentaba mientras el día, el tiempo corría. Empeoró, al pasar al hospital su delicado estado no permitía que nada externo pudiese contactarla, un ambiente estéril total hasta d...

Buscas de acercarte A esta realidad. Qué habíamos formado juntos. Esta realidad en la que ahora no puedes entrar. Haz desaparecido de tu mundo ideal, hago referencia a la capacidad de crear, con la que has perdido tu cuota mensual de la trascendente energía transformada por tus propias manos. Todo se va colapsando, me cuesta creerlo, me cuesta aceptarlo; hago el esfuerzo, esa triste ilusión de esperar ver entre tan vasto caos a la inestable diosa dueña de las memorias. Un mundo que ya no existe, es un mundo que jamás existió. Cuando olvides tu infancia yo ya no seré ese Dios, mis hermanos los ángeles rezan por temor a que crezcas como humana, como esos seres sin imaginación.

Nacemos siendo soñadores. Crecemos imaginando mundos en los cuales jugar. Disfrutamos cada momento efímero, y No paramos de reír y de llorar. Creemos que somos destructores, Que nuestro mundo pronto se acabará Y que ya no habrá personas Que se tomen en juego este paraíso terrenal. Para vivir sin rendirse, y sin dejar de pensar en los demás. No se dieron cuenta, ¡Oh, humanos! Que somos fieles a las leyes, Creamos sin cesar. Somos naturalmente reyes, Señores deformadores de la realidad, Manipulamos a nuestro antojo nuestra historia Y parcialmente, el futuro incierto que nos depara. En esta inestable e ilógica, Vida sentimental. Basada en una desdichada, apresurada, composición material de realidad.

¿De qué se ríe el poeta? Si no es de sus letras, el puño marcado como sello en el papel. Sabrá que sus lienzos son hojas al aire, su pincel es el lápiz improvisador. A veces varía, su teclado escondido, guarda sus letras que verán en cristal. No hay nada mejor que reír del amor, ganarse la vida con su vocación, estar relajado en un cómodo tiempo, donde no reine el sudor sino la inspiración. Pero, ¿De qué ríe? Si no es del aire. ¿De qué come? Si no es lo que crea. ¿Comerá a la gente, hará lo que sea? Basta con saber que hay un escritor, allí los vemos no tienen temor. Al brazo abrazador de la tímida sociedad, se encuentran ocultos, sirviendo al mal. La sociedad no aprecia al arte, ¡Si no tiene nada que arrojar! Se agrupan los cuentos, se unen las novelas, las historias proféticas se quedan sin grupo (las acogen pero no entienden los puntos). Los signos se quedaron sin exclamación. Ya no hay nada que hacer nos toca morir, o vivir como dioses creando maravillas, sin preocupaciones...