¿Existiremos realmente?

Nacidos del vacío
entre el inmenso cosmos que aún, en ese momento,
era insignificante.
Dentro del polvo de estrellas,
una sola roca bastó para fundirse
en un planeta, entre otros miles,
entre miles de galaxias, de cúmulos, de otros cientos
de cúmulos de estrellas.
De uno a mil, millones de células,
por primera vez un ser evoluciona.
Y dice ser el único entre todos, el no animal,
el bondadoso...
Entre sentidos, pierde el sentir;
entre sonidos, no escucha;
entre colores, todo lo vuelve gris;
entre tanto amor, lo destruye,
su mundo lo destruye.
Hace falta que vea su mano,
otra vez.
Hace falta que sienta su cuerpo,
otra vez.
Hace falta que viva de verdad, plenamente, inocentemente, fugazmente,
otra vez...
Como lo fue en su niñez, que tan sólo era, y nada más,
que simple y místico polvo de estrellas.
¿Aún desafiando su origen, aún desconociéndolo todo, negándolo todo, perdiéndolo todo, sabe que es realidad?
Entre el inmenso cosmos, desde la mínima roca,
desde su origen hasta el final, el infinito, y lo absoluto...
¿Todos se comportaran igual?
Sabrá alguien, o algo,
un ente, un ser, un código, un objeto, un material, un elemento...
Existirá acaso, un indicio de que...
¿Existiremos realmente?
O todo será un cuento de estrellas.
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